Hacer manualidades con los más pequeños de la casa es una actividad muy divertida y con la que pueden aprender cantidad de cosas. Por ejemplo, podemos aprovechar materiales que a primera vista no tienen ningún uso y enseñarles a reciclarlos o reutilizarlos. Será una buena manera de concienciar a los niños/as de la importancia de dar nuevos usos a aquello que parecía ser inservible. Podemos basarnos en la regla de las 3 R: reducir, reciclar y reutilizar, y concienciar así a los niños/as de la necesidad de preservar el medio ambiente y el planeta en general.
A QUI VEMOS UNA TORTUGA HECHO CON PAPEL RECICLABLE
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